Redacción. La Policía Nacional ha detenido en San Fernando a seis personas dedicadas a estafas en Internet y a las que se las acusa de ser los presuntos autores de los delitos de estafa, usurpación de identidad, blanqueo de capitales y asociación ilícita. Los detenidos supuestamente utilizaban aplicaciones móviles para venta de productos por Internet, donde publicitaban aparatos tecnológicos de alta gama tipo consolas, robots de cocina o smartphones a precios muy competitivos por debajo de su precio habitual en el mercado de ocasión.
Se han esclarecido un total de 55 denuncias interpuestas a lo largo de toda la geografía española, elevándose el montante total de lo defraudado en más de 30.000 euros.
La investigación se inició a raíz de las numerosas denuncias interpuestas en todo el territorio nacional donde los afectados habían realizado el pago vía ‘efectivo-movil’ por productos ofertados en aplicaciones móviles especializadas en la venta de productos de segunda mano que nunca llegaron a recibir. Estas aplicaciones permiten un contacto directo del comprador con el vendedor vía chat, donde se concertaba el precio y la manera de pago del mismo, así como el envío del mismo mediante paquete postal.
Para hacer de «cebo» en las aplicaciones de compraventa de artículos se exponía las fotografías del producto, resultando ser coincidentes en las repetidas ventas. A modo de ganarse la confianza del comprador, el supuesto vendedor le enviaba una fotografía de su rostro portando un DNI que de ninguna manera resultaba ser la verdadera identidad, sino la otra persona que en otra transacción de buena fe la habría enviado, captando la organización esta fotografía y utilizándola como medio para cometer estafas.
Una vez concertado el precio final del producto, el vendedor convencía a la víctima para que se realizara una transferencia bancaria bajo el método ‘efectivo-movil’, un servicio bancario que permite enviar dinero en efectivo al teléfono móvil de cualquier persona de manera inmediata y para lo cual se envía un SMS al beneficiario, pudiéndose retirar el dinero de un cajero sin ser cliente del banco ni usar tarjetas de crédito, únicamente mediante la introducción en el cajero del código que se envió en ese SMS.
Así, fruto de las gestiones practicadas los investigadores descubrieron la identidad de seis personas que formaban una grupo organizado asentado en San Fernando dedicado estafas en Internet. El grupo tenía una distribución de roles y una compleja estructura de trabajo, en la cual necesitaban la participación de otras personas utilizadas como mulas para procurar la impunidad de la cúpula tras descubrirse una transacción fraudulenta, tales como realizar aperturas de cuentas bancarias o líneas telefónicas para realizar los contactos, al igual que procurarse personas que realizaban la retirada del efectivo.
Una vez finalizado el atestado policial, los detenidos fueron puestos a disposición del Juzgado de Instrucción en funciones de guardia en la ciudad de San Fernando, cuyo magistrado tras oírlos en declaración decretó ingreso en prisión para dos de ellos, quedando el resto en libertad con cargos. Todos los detenidos e investigados son residentes en San Fernando.