Fermín Cabanillas. Paula Payán se sorprendió al abrir la bolsa de patatas que su madre le había traído del supermercado. La joven gaditana, publicaba ayer en sus Redes Sociales en varias perspectivas la foto del paquete de patatas fritas que contenía algo inusual en su interior.
La marca de patatas ‘Cortijo del Olivar’ presentaba una sorpresa en esa bolsa: unas gafas de ver con montura y cristales incluidos, según publica La Voz de Cádiz.
Paula explicaba en su cuenta de Instagram que «alguien, un trabajador o trabajadora, al hacer el paquete, se había dejado sus gafas en el interior».
La marca le respondió
Horas después, la propia marca ha respondido a Paula en Twitter afirmando que las gafas pertenecen a Manolito, uno de sus trabajadores que «sin sus gafas no ve nada».
La joven se reía y compartía también a través de Twitch este suceso tan poco corriente, y en pocos minutos empezó a recibir numerosas reacciones de los usuarios.
«Pensamos guardar el paquete como si de oro se tratase», comentaba en su cuenta mientras enseñaba con pruebas el «premio» de esta bolsa de patatas que ahora, tiene en exclusividad la gaditana.
Paula ha decidido no presentar reclamación alguna, sino que el tema se quedará como una anécdota.