Redacción. El Hospital Universitario de Jerez está aplicando nuevas técnicas para la rehabilitación vocal en pacientes sometidos a cirugía de laringuectomía total por cáncer de laringe. Pese a la pandemia, el pasado año se incorporó esta novedad consistente en la colocación de prótesis fonatorias, que mejoran la calidad de vida de estas personas que han perdido la capacidad de fonación y, en consecuencia, el habla.
La especialista en Otorrinolaringología (ORL) del hospital jerezano, María Agustina Ariza, ha explicado que la laringuectomía total (LT) forma parte de las opciones terapéticas en las neoplasias de cabeza y cuello, sobre todo en el cáncer laríngeo o faríngeo localmente avanzado, y como tratamiento de rescate por recidiva o persistencia tumoral tras un tratamiento de quimioterapia o radioterapia.
Así, ha señalado que esta técnica quirúrgica consiste en extirpar la laringe y, a veces, parte o la totalidad de las estructuras adyacentes (tráquea, base de la lengua, tiroides, faringe, esófago, musculatura cervical, etcétera), que puedan estar afectadas por una lesión maligna. Al extirpar la laringe, es necesario abocar la tráquea al exterior de forma permanente mediante un orificio en la región anterior del cuello, que se denomina traqueostoma.
Silicona quirúrgica de alta calidad
Esta cirugía conlleva, entre otras cuestiones, la pérdida de la capacidad de fonación y, en consecuencia, del habla. Esta secuela, según ha asegurado Ariza, «es muy limitante para la relación social del paciente y, aunque existen técnicas que intentan suplir este déficit, como la voz erigmofónica (esofágica) o el uso de sistemas electrónicos externos, actualmente son las prótesis fonatorias las que permiten una mejor calidad de voz y, por tanto, una mejor calidad de vida».
La colocación de dicha prótesis se hace bajo anestesia general y puede realizarse, bien al mismo tiempo que la cirugía para tratar la neoplasia de laringe (prótesis primarias), o en un segundo tiempo, cuando han finalizado los tratamientos complementarios a la enfermedad (prótesis secundarias, más frecuentes), y consiste en realizar una punción entre tráquea y esófago, donde se inserta la prótesis fonatoria.
Estas prótesis son de silicona quirúrgica de alta calidad y duran entre uno y seis meses, debiendo sustituirse a partir de entonces o cuando empiecen a dar problemas; esta sustitución se realiza con anestesia tópica en la propia consulta de ORL, no precisando ingreso ni anestesia general.
Hasta el momento, en el Hospital de Jerez se han seleccionado a cinco pacientes que han sido intervenidos mediante la colocación de una prótesis primaria, «con muy buenos resultados sobre la calidad de vida», ha informado esta especialista en ORL, quien ha añadido que hay otros cinco candidatos pendientes de prótesis secundarias.