Europa Press. Salvamento Marítimo ha rescatado a dos jóvenes, un hombre y un a mujer de 22 años de edad, a bordo de una embarcación de pequeño tamaño, arrastrada dos millas al oeste del Castillo de San Sebastián de Cádiz como consecuencia de los fuertes vientos registrados en la noche de este jueves.
Según han informado desde Salvamento Marítimo a Europa Press, a las 5,11 horas se ha recibido una alerta desde el Servicio Unificado de Emergencias de Andalucía 112 al Centro de Salvamento Marítimo de Cádiz advirtiendo de la existencia de una embarcación tipo chinchorro, un bote auxiliar de unos dos metros, que se había embarcado en la zona de La Caleta y que se estaba alejando de la costa por el viento de levante.
De modo inmediato, los coordinadores marítimos del centro de Salvamento de Cádiz proceden a activar al helicóptero Helimer 201 y a la embarcación la Salvamar Suhail, además de contactar con el buque ‘Ensemble’, que se dirigía a Cádiz, para que extremara la vigilancia por si localizaba el citado bote.
Divisándolos gracias a la luz del teléfono
Desde el Ayuntamiento de Cádiz se indica en un comunicado que tras recibir aviso del Servicio Unificado de Emergencias de Andalucía 112 que hasta la zona se envió también a dos dotaciones de la Policía Local, logrando contactar con uno de los jóvenes a través del móvil y divisándolos gracias a la luz del teléfono, trasladando posteriormente esta información a Salvamento Marítimo.
En este marco, desde Salvamento se detalla que ha sido este buque el que ha dado la localización de la pequeña embarcación, dirigiéndose a la zona el Helimer 201 y, a continuación, la Salvamar Suhail, quien finalmente subiría a los dos jóvenes a bordo 7,23 horas. Ambos, que se encuentran en buen estado aunque con un poco de hipotermia, pero sin tener que recibir atención médica, trasladados, junto a la embarcación, a Puerto América.
Según añade el Consistorio, los jóvenes han manifestado, una vez en tierra, que «se subieron a una pequeña embarcación perteneciente al Club Náutico y que, cuando se dieron cuenta, arrastrados por el fuerte viento, sin que fuese su intención hacerse con la embarcación».