Redacción. El Ayuntamiento de Cádiz, a través de la Delegación de Asuntos Sociales, ha presentado el proyecto Popi ‘Estrategias y acciones en zonas desfavorecidas de Andalucía, que apoyan y mejoran los procesos de inclusión sociofamiliar en familias con menores en situación de absentismo y vulnerabilidad social’ que ya ha comenzado a desarrollar.
Se trata de una iniciativa que contribuirá a reducir el absentismo y mejorar el rendimiento escolar en familias con más dificultades. La concejala de Asuntos Sociales, Helena Fernández, ha destacado “la importancia que tiene la educación dentro del desarrollo personal y social de los menores. Es necesario seguir trabajando de forma transversal y por supuesto con la implicación de las familias. Realizar un abordaje con medidas integrales que incidan tanto sobre las problemáticas académicas como sobre las sociales”. La concejala de Asuntos Sociales ha avanzado que en este proyecto participarán unos 120 menores procedentes de unas 60 familias.
A través de una subvención conseguida por el Ayuntamiento y distribuida por la Junta de Andalucía del Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones en el ámbito de la inclusión social, en el marco del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia, “vamos a desarrollar un proyecto para mejorar los procesos de inclusión sociofamiliar en familias con menores en situación de absentismo y otras problemáticas”.
Las familias destinatarias son las residentes en las zonas consideradas desfavorecidas y que están dentro de la zona ERACIS y alrededores. Que tengan menores entre los 6 y 16 años y que estén en situación de absentismo y/o vulnerabilidad social. Estas familias deben ser perceptoras o potenciales beneficiarias del ingreso mínimo vital o de la renta mínima de inserción de Andalucía.
Para este proyecto se está contratando a 10 personas para formar un equipo compuesto por cuatro profesionales de trabajo social, dos de psicología, tres de educación social y una persona técnica de coordinación.
Se realizará un itinerario de cada una de estas familias para mejorar sus procesos de inclusión social. Helena Fernández ha explicado que el proyecto “se va a desarrollar en tres fases a lo largo de los próximos 14 meses”. Una primera fase (entre febrero y marzo) de acogida de la familia seleccionada por parte del equipo de asuntos sociales en la que se realizarán sesiones de trabajo con la familia para realizar un diagnóstico familiar y la elaboración del itinerario. Una segunda fase (entre abril y noviembre) de desarrollo del itinerario de inclusión sociofamiliar y de intervención en las familias y una tercera de evaluación.
Dentro de estas tres fases se realizará trabajo con las familias y sus dinámicas familiares, trabajo con los menores, trabajo individualizado con los adultos y coordinación de la acción tutorial entre el centro educativo y los servicios sociales.