Redacción. El teniente de alcalde de Medio Ambiente de El Puerto de Santa María (Cádiz), Millán Alegre, ha censurado este domingo el vandalismo de quema continuada de contenedores en esta Semana Santa, que «ha asolado distintos puntos de la ciudad», provocando no solo daños al mobiliario urbano, sino a varios vehículos estacionados al lado de los mismos, prácticamente calcinados, y ha informado que la Policía Local está investigando los hechos.
El Ayuntamiento explica que la ciudad lleva días amaneciendo con una estampa desoladora, fruto de actos vandálicos o «acciones coordinadas para crear el «caos, con el consecuente desembolso económico que esta acción repetida supone para las arcas municipales y, por supuesto, para los vecinos de El Puerto y propietarios de los vehículos afectados, que ni se imaginaban cuando aparcaron su coche el destino que iba a tener.
Desde el Ayuntamiento de El Puerto «no se entiende la satisfacción que pueden encontrar los autores de estas fechorías, cuyas consecuencias son devastadoras, pues sus actos son en toda regla un atentado contra la ciudad».
Diez contenedores
Así pues, ha habido una quema de isleta de contenedores en Angelita Alta la noche del Jueves Santo, en la avenida de Fuentebravía la madrugada del Viernes Santo y en la noche del sábado dos ubicaciones en el Camino de Los Enamorados es el saldo de los últimos días. En total, diez contenedores, tanto para reciclaje como para residuos orgánicos-restos, reducidos a cenizas con un coste aproximado de 7.950 euros, más los daños colaterales.
Millán Alegre lamenta profundamente que la ciudad tenga que pagar las consecuencias de esta barbarie, que obviamente recorta el presupuesto de otras cuestiones relevantes para El Puerto, que «pagamos todos los portuenses».
La Policía está investigando los sucesos con el objetivo de capturar a los malhechores y descubrir quién o quiénes están detrás de estos atentados contra el mobiliario urbano de la ciudad, por lo que pide la colaboración ciudadana para dar con ellos, a los que «es evidente que no frena ni el toque de queda y que se amparan en la nocturnidad para actuar».